Hoy hablaremos de lo que varios toluqueños nacidos en nuestra bella capital, así como también los muy bienvenidos adoptados a esta solidaria ciudad, podrían saber sobre el Marquesado del Valle de Oaxaca:
Como hemos leído sobre este interesante e histórico tema, expresamos sobre Carlos V de Alemania y I de España, que por Cédula de fecha 6 de julio de 1529, dada en Barcelona, hizo Merced, gracia y donación a Hernán Cortés Gobernador y capitán general de la Nueva España de veintitrés pueblos, entre los que figuraban Toluca y Matalcingo (Cliaxtlahuaca). En la misma fecha, Carlos V, también por Cédula dada en Barcelona, España, tuvo a bien y fue su merced y voluntad llamar, e intitular a Hernán Cortés, Marqués del Valle de Oaxaca. Así nació a lo que sería después el llamado Estado y Marquesado del Valle de Oaxaca; estado con cierta autonomía dentro del virreinato de la Nueva España. Es larga la lista de los Marqueses del Valle, que se inicia en el año de 1529 y concluye en el año de 1811, aunque el título ligado a los Ducados de Terranova y Monteleón, se promulga hasta el siglo XX.
Las Ordenanzas que han de observar, guardar, cumplir y ejecutar los Ministros del Estado y Marquesado del Valle dadas en Madrid el 19 de marzo de 1776, constituyen un resumen de la Historia del Marquesado y el primer Código o Constitución del mismo. Don Héctor María de Aragón, Pignatelli, Cortés, Medecis, Mendoza, Pimentel, Quiñones, Manrique de Lara, Henrriquez, Duque de Terranova Monteleón y Belizguardo, Príncipe de Castelveltrano y Noya, Marqués del Valle de Oaxaca en los reinos de la Nueva España, de Caronia, de Abola, de Fabara y Cerchiara, Conde de Borrelo y de Borgheto, Barón de Menfis, de San Angelo, de Casteltermine Montedoro y Montesoro, de Castel Monardo, de Monterroso, de Polia y Poliolo, Belice, señor de las ciudades de Briatico, y Rosarno, de Mesiano, Motefilocastro, y de Ferolito, Gran Prefecto del Castillo de Bibona y Grande de España de primera clase, concedido poder A don Miguel de Larrea y Vitorica, Secretario Escribano mayor de los Reinos de España, juntos en Cortés, Regidor Perpetuo de la ciudad de Toro Director General del Estado y Marquesado del Valle de Oaxaca, quien redactó las Ordenanzas.
Don Miguel de Larrea, recordó que la corona, le hizo Merced a Hernán Cortés, para que quedase razón y perpetua memoria de ellos, le hizo esta Merced, gracia y donación, pura, perfecta y no revocable, que es dicha entre vivos, para siempre, de las expresadas Villas, sus tierras, aldeas y términos, vasallos y jurisdicción civil y criminal, Alta, y de Vaxa mero mixto imperio, rentas, oficios, pechos y derechos, montes y prados, pastos y aguas, corrientes, estantes y manantes con todas las demás cosas, que su Majestad tuviese, llevase y le perteneciera, podía llevar y gozar en las tierras, que para la Corona Real se señalasen en la Nueva España; y con todo lo demás que corresponda al Señorío de dichas Villas y pueblos, en cualquier manera, con facultad de poderlo vender, donar y enajenar como cosa propia y habida por justo título, reteniendo su majestad solamente en sí, la Soberanía de la Justicia Real.
Véase que todas estas facultades, dadas por la corona, hacían del Estado y Marquesado del Valle de Oaxaca, en realidad, un Estado dentro de otro Estado. Tal era el poder de los Marqueses del Valle y Duques de Terranova y Monteleón, con considerables títulos de nobleza y grandes de España. El de Larrea exponía que las Villas, Aldeas y pueblos del Marquesado, estaban sujetas a siete Cabeceras y Partidos, cuyos nombres eran los siguientes:
- Cuatro Villas de Oaxaca.
- Cuernavaca con sus pueblos.
- La ciudad de San José de Toluca con su jurisdicción.
- Coyoacán y sus pueblos.
- Tuxtla y Cotaxtla con los pueblos de su jurisdicción.
- San Miguel de Charo Matalcingo.
- La Villa de Jalapa de Thehuantepeque (Tehuantepec).
Un mapa de todas las posesiones del Marquesado, comparado con el mapa de nuestra República, demostraría la considerable extensión del citado Marquesado, algo así como la mitad del México actual. El Estado y el Marquesado del Valle de Oaxaca, no ha sido estudiado exhaustivamente y sería necesario, como ya se ha propuesto, estudiar en obra especializada la estructura jurídica del Estado de dicho Marquesado y sus posesiones. Estos apuntes históricos tienen como objetivo, señalar que la ciudad de San José de Toluca con su jurisdicción, formaba el Corregimiento de Toluca, antecedente de la Municipalidad de Toluca.
El corregimiento de Toluca:
No se ha encontrado documentación histórica, para divulgar, para tener el conocimiento de la fecha en que fue instituido el Corregimiento de Toluca del Estado y Marquesado del Valle de Oaxaca. Dentro de la estructura del Marquesado, están los corregimientos. Un corregimiento que establece una jurisdicción y está gobernado por un corregidor. Corregidor, no es el que corrige, enmienda o rectifica en este caso, sino que el rige o gobierna, con otros. Los Marqueses del Valle, con las prerrogativas que les concedió la corona, se opusieron siempre a fundar ciudades, villas y pueblos de importancia, porque estas fundaciones tendrían una importante población de peninsulares, y criollos. La historia demuestra que los peninsulares y criollos eran opositores de los Marqueses, porque se consideraban súbditos de la Corona, que era la negación de la autoridad de los Marqueses y su jurisdicción. Sin embargo, vamos a ver que, aun contra la oposición de los Marqueses, en Toluca, con una numerosa población de peninsulares o gachupines, los recién llegados y de criollos, estos, entre los que figuraban personas con títulos nobiliarios, ejerciendo sus derechos lograron incorporarse a la autoridad del Corregidor, un cuerpo de regidores que formaban los Regimientos.
Los corregidores de Toluca, eran nombrados por los Marqueses, por el Gobernador, Justicia Mayor y Administrador General del Estado y Marquesado del Valle. Existió un caso insólito: el Rey de España nombra a un corregidor de Toluca, seguramente durante la vigencia de un secuestro. Los Corregidores, gobernaban de acuerdo con las instrucciones del Marquesado. Existen notables instrucciones que ya hemos divulgado. El Corregidor automáticamente se convertía en Alcalde de la Santa Hermandad, es decir, se transformaba en el jefe del Cuerpo encargado de guardar el orden público y la seguridad de los caminos, combatiendo a los bandoleros. Era también Juez de Obrajes, Tenerías, Matanzas, Caminos y Haciendas y para tales fines, traía vara alta de la Real Justicia.
Las autoridades del Corregimiento de Toluca, eran, además, los siguientes:
- Alguacil Mayor.
- Juez Mayor.
- Merino Mayor.
- Alcalde de la cárcel.
- Escribano.
- Regidor Mayor.
- Mayordomo.
La actuación del Corregidor, don Nicolás Gutiérrez mereció el reconocimiento público por su extraordinaria gestión, y por la realización de obras para beneficio de nuestra ciudad. Desde hace muchas décadas, los habitantes de Toluca, con mucha posterioridad al Virreinato lo siguieron honrando, dando nombre a una calle de nuestra capital: calle del Corregidor Gutiérrez.