Recuerdo esta gran época de nuestra Toluca la Bella (tacita de plata, con olor a sacristía, Enrique Carniado), viviendo mi niñez esta inolvidable experiencia ya que la casa de mis padres en ese entonces estaba ubicada en Villada No. 500, donde hoy en día se encuentra uno de los conocidos restaurantes Santa Mónica, enfrente del Templo de las tres naves San José el Ranchito; así como también recordando a mis estimados vecinos; las familias Laurent, la familia Segura, la familia Velasco , la familia Talavera, la familia Gutiérrez Plata donde hoy su hija la apreciable y gentil Chatita Gutiérrez está al frente de su prestigiada escuela Cri Cri, entre otros.
Referente al deporte y por el interés que siempre ha caracterizado al estimado don José Acra Carmona, uno de ellos el automovilismo y, con un grupo de entusiastas jóvenes de esa época dentro del Club de Servicio “20-30” liderado por el mismo, organizaron carreras de Toluca hacia Capultitlán, por todo paseo Colón, mitad en serio, mitad en broma con carros jalados por mulitas que entonces hacían el servicio el servicio de recolección de basura en nuestra ciudad.
Desde 1955 a 1962, en los festejos del 12 de Octubre (Día de la Raza) los jóvenes a los que ya se había integrado Sixto Franco Santos (qepd) padre de los estimados amigos Franco de la Rosa, , organizaron el Circuito Colón con un recorrido que se iniciaba frente a la 22 Zona Militar, dando vuelta en el monumento y glorieta a Cristóbal Colón para llegar al monumento del Centenario de la Independencia mejor conocido como “El Águila de Colon”, donde se cambiaba de carril hacia la Iglesia del Ranchito, o sea la esquina con la calle de Gral. Francisco Murguía para tomar la recta de la Avenida Benito Juárez llegando a la meta en la terracería del futuro Paseo Tollocan, después de varias vueltas según la categoría de la carrera.
Comenzaron corriendo carcachitas, pero en los últimos circuitos ya compitieron autos de la época, verdaderos bólidos.
Por otro lado, se integró primero el Club Automovilístico de Toluca o CADET y después el Toluca Automóvil Club o TAC quien organizó las cinco carreras llamadas Presidenciales en honor del Lic. Adolfo López Mateos, entonces C. Presidente de la República con un recorrido de la Marquesa-Toluca-Ixtapan de la Sal.
El entusiasmo de los pilotos toluqueños los llevó a competir en otras ciudades de la República Mexicana como Puebla, Cuernavaca, Pachuca, León y Aguascalientes, así como también el famoso Circuito Avándaro en Valle de Bravo.
Se distinguieron por su participación, coraje, valentía y calidad además de los ya mencionados; Rafael “Chivo” Pérez, Vicente Márquez, Toño San Juan, Eduardo “güero” Baca, Mariano, Roberto y Juan Salgado Montesinos, Osvaldo y Pedro Armando Gómez Núñez, Camilo Orozco, Manuel Ibáñez, Guillermo y Poncho Villa, Eduardo Zenil, Jorge Ceballos, Pedro de la Vega, Eduardo “el Charal” Díaz Leal, Sergio Olguín del Mazo, Ricardo Barraza, Andrés Cadena, Víctor Manuel Bernal, Gustavo “el pájaro” Estrada, Jorge “el oso” Vilchis y posteriormente Paco “el chango” Negrete entre otros, quienes compitieron con los pilotos que en ese entonces se distinguían a nivel Nacional e Internacional como “el bache” Mariscal, José Antonio y Moisés Solana y los hermanos Ricardo y Pedro Rodríguez.